En el siglo XV se funda el Convento agustino de los Ángeles, concrétamente en 1436, sobre lo que había sido una antigua ermita ubicada en el nacimiento del Arroyo "Hontanija" y la Fuente de los Ángeles. Por el Convento pasaron personajes ilustres de la época como Santo Tomás de Villanueva, en los tiempos en que fue predicador de Carlos V, antes de ser nombrado obispo de Valencia.
En la actualidad es de titularidad privada.